**Analía Franchín pide por el exmarido de Julieta Prandi y desata un escándalo en vivo**
Un tenso momento televisivo estalló en el programa de Georgina Barbarossa cuando Analía Franchín, en una pregunta inesperada, abordó la situación del exmarido de Julieta Prandi, quien enfrenta una condena de 19 años. La polémica se desató cuando Franchín cuestionó a Prandi sobre la posibilidad de que su ex reciba prisión domiciliaria para poder cuidar a su recién nacida, una pregunta que dejó a todos los presentes en shock.
Prandi, visiblemente incómoda, respondió con una crítica a la falta de empatía de Franchín, afirmando que su interés parecía centrarse más en la figura del exmarido que en el sufrimiento que ella ha vivido. La tensión en la mesa aumentó, con otros periodistas defendiendo la labor de Franchín, quien argumentó que su pregunta era parte de su trabajo como periodista.
El debate se intensificó, con opiniones divididas sobre la ética de la pregunta y la responsabilidad del periodista en situaciones tan delicadas. Mientras algunos defendían la necesidad de cuestionar, otros denunciaron la falta de sensibilidad hacia la víctima, Julieta Prandi, quien ha atravesado años de sufrimiento.
Las redes sociales no tardaron en reaccionar, inundando los comentarios sobre el episodio. La controversia ha puesto en primer plano las tensiones entre el deber periodístico y la empatía, un tema que sigue resonando en la opinión pública. La pregunta de Franchín, lejos de ser un simple interrogante, ha destapado un debate profundo sobre la moralidad en el periodismo y el tratamiento de las víctimas en situaciones de abuso.
Este escándalo no solo ha capturado la atención de los medios, sino que también ha generado un clamor por una mayor responsabilidad y sensibilidad en la cobertura de temas tan delicados. La pregunta es: ¿hasta dónde debe llegar un periodista en su búsqueda de la verdad? La respuesta, sin duda, seguirá dividiendo opiniones.