**Con tus impuestos, Milei da pensiones a israelíes que vengan a Argentina**

En un giro alarmante de los acontecimientos, el presidente Javier Milei ha firmado un acuerdo que destina pensiones a ciudadanos israelíes que decidan establecerse en Argentina, mientras que los jubilados argentinos apenas reciben un aumento del 7.2%. Esta decisión ha desatado una ola de indignación en la sociedad argentina, que se pregunta cómo es posible que se prioricen los intereses de otros países sobre las necesidades de los propios ciudadanos.

El polémico acuerdo, en el que Milei se alinea con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, ha sido calificado como un acto de traición al pueblo argentino. Santiago Cuneo, un destacado crítico del gobierno, ha denunciado públicamente la situación, señalando que el presidente parece operar bajo una “locura mesiánica”, creyendo que su misión es salvar al pueblo judío. Cuneo enfatiza que este comportamiento no solo es irresponsable, sino que también pone en riesgo la estabilidad social y económica de Argentina.

Las acusaciones no se detienen ahí. Cuneo también ha instado a la justicia a evaluar la salud mental de Milei, sugiriendo que su estado psiquiátrico podría estar afectando su capacidad para gobernar. “Estamos ante un loco desquiciado que toma decisiones criminales sobre la vida de los demás”, afirmó, mientras ratificaba su denuncia en los tribunales.

La situación es insostenible. La comunidad argentina se siente traicionada y abandonada, mientras los recursos del Estado se desvían hacia el beneficio de extranjeros. La indignación crece y las voces de protesta se intensifican, exigiendo respuestas y justicia. La pregunta que todos se hacen es: ¿hasta dónde llegará Milei en su búsqueda por complacer a otros estados a expensas de su propio pueblo? La respuesta podría definir el futuro de Argentina.