Andrés Gil Domínguez lanza una advertencia contundente contra Javier Milei y Patricia Bullrich, señalando un alarmante desvío de la democracia hacia un autoritarismo encubierto. En un análisis incisivo, Domínguez denuncia las acciones de Milei, quien, tras ser elegido democráticamente, ha comenzado a gobernar como si estuviera por encima de la Constitución y de los derechos humanos.

El experto enfatiza que Milei está utilizando su poder de veto no solo como una herramienta de gobernanza, sino como un mecanismo para socavar el funcionamiento del Congreso. “Si no le conviene una ley, simplemente no la cumplirá”, advierte, poniendo en riesgo derechos fundamentales, especialmente en el área de discapacidad.

La situación se torna aún más crítica con la reciente reestructuración de la policía federal, donde Milei ha creado un servicio de inteligencia al margen de la ley, sin control parlamentario. Domínguez recuerda un oscuro pasado de represión, sugiriendo que estamos ante un regreso a prácticas que creíamos superadas. “Esto podría convertirse en una moneda corriente, una repetición de épocas que creíamos olvidadas”, afirma, evocando el caso de Walter Bulacio, cuya muerte a manos de la policía dejó una marca imborrable en la historia del país.

Con el decreto firmado justo antes de una movilización, se teme que las detenciones arbitrarias y la represión se conviertan en la norma. La advertencia es clara: la democracia está en peligro. La comunidad internacional y los organismos de derechos humanos deben estar alertas ante esta alarmante regresión autoritaria. La pregunta que queda en el aire es: ¿hasta dónde llegará Milei en su búsqueda de poder absoluto?