En las últimas horas, las redes sociales se han visto sacudidas por una supuesta profecía de Baba Vanga, la famosa vidente búlgara conocida por sus predicciones apocalípticas y misteriosas. Según la información viralizada, la profecía asegura que Lionel Messi enfrentará mala suerte si decide retirarse del fútbol mientras Cristiano Ronaldo aún sigue en activo.
El mensaje, que se difundió ampliamente en plataformas como Twitter, TikTok y Facebook, afirma lo siguiente: “Si el León del Sur apaga su fuego antes que el Dragón del Oeste, el equilibrio será roto, y la desgracia caerá sobre su casa. Debe haber justicia en los ciclos del fútbol.” Muchos interpretaron estas palabras como una advertencia directa a Messi, sugiriendo que retirarse antes que Cristiano Ronaldo podría tener consecuencias negativas para él y su familia.
Ante el creciente revuelo, Lionel Messi decidió responder con calma y claridad en una entrevista exclusiva concedida a un medio argentino desde Miami: “Escuché algo sobre esa profecía… pero sinceramente, no creo en esas cosas. Nunca me guié por predicciones, ni buenas ni malas. Mi carrera, como mi vida, la tomo con responsabilidad, amor y dedicación. El resto es puro ruido.”
Messi, quien actualmente milita en el Inter Miami, se encuentra en plena forma y aún no ha anunciado una fecha concreta de retiro. Por su parte, Cristiano Ronaldo, con 40 años, sigue activo en el fútbol saudí, lo que alimenta aún más la curiosidad sobre cómo terminará la historia de estos dos íconos.
El campeón del mundo también agregó: “Ronaldo y yo hicimos historia en el fútbol. Lo respeto mucho como rival y como profesional, pero cada uno tiene su camino. Nadie decide cuándo se acaba una etapa, salvo uno mismo.”
Mientras tanto, los fans continúan especulando en redes sociales, entre supersticiones y deseos, aunque queda claro que para Messi, las decisiones sobre su futuro se tomarán con los pies en la tierra y no por lo que diga una profecía.
Así, una vez más, Lionel Messi demuestra que, más allá de su magia en el campo, su fortaleza también está en la cabeza… y en el corazón.