**Rusia contraataca: La escalada del conflicto en Ucrania alcanza un nuevo nivel de tensión**
En un giro drástico en la guerra entre Rusia y Ucrania, el ejército ucraniano ha llevado a cabo un ataque audaz que ha resultado en la destrucción de al menos 40 aviones rusos, incluidos algunos en un aeródromo en Siberia, a miles de kilómetros de la frontera. Este ataque, que se estima ha costado a Rusia aproximadamente 7,000 millones de dólares, marca el mayor uso de drones en un ataque por parte de Ucrania desde el inicio del conflicto.
La respuesta de Moscú no se ha hecho esperar. En la noche del domingo, Rusia lanzó un contraataque devastador, utilizando 80 drones y cuatro misiles balísticos. Las fuerzas aéreas ucranianas lograron neutralizar 52 drones, pero los misiles, incluidos los Iskander, lograron sus objetivos en varias regiones, incluyendo Jarkov y Chernigf.
Mientras tanto, la atención global se centra en Estambul, donde se lleva a cabo la segunda ronda de negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania. Las expectativas son bajas, pero Ucrania ha llegado con una “agenda clara” y la disposición de dar pasos significativos hacia la paz. Sin embargo, el presidente estadounidense Donald Trump se ha desmarcado de la reciente ofensiva ucraniana, afirmando que Estados Unidos no proporcionó inteligencia para estos ataques.
El escenario se complica aún más con la situación dentro de Europa, donde las elecciones en Polonia están generando un cambio político significativo, y la OTAN observa de cerca los acontecimientos. La creciente tensión entre las potencias globales, especialmente con China, no hace más que intensificar la inestabilidad en la región.
La situación es crítica y está en constante evolución. El mundo observa con ansiedad cómo se desarrollan los eventos en el conflicto más devastador de Europa en décadas.