El mundo de la música se encuentra de luto tras el fallecimiento de Héctor Jorge Luis Saco, conocido artísticamente como Sabu, a la edad de 54 años. Su muerte, ocurrida el 16 de octubre de 2005, fue consecuencia de un cáncer de pulmón agresivo que se desarrolló tras una cirugía de vértebras cervicales, la cual había sido realizada para tratar un persistente dolor de cuello.
Sabu nació el 12 de septiembre de 1951 en Buenos Aires, Argentina. Desde muy joven enfrentó adversidades, incluyendo la muerte de su madre y una infancia marcada por el maltrato de su madrastra. A los seis años, comenzó a robar comida para sobrevivir en las calles, hasta que fue acogido por una familia que le proporcionó educación y un hogar. Su pasión por la música emergió a los 17 años, cuando lanzó su primer sencillo, comenzando así una exitosa carrera que lo llevaría a grabar más de 15 álbumes y recibir numerosos reconocimientos, incluidos 27 discos de oro y siete de platino.
A pesar de su éxito, Sabu tuvo que lidiar con problemas legales y personales a lo largo de su vida. En 1971, fue arrestado por su supuesta conexión con una banda de delincuentes, aunque fue liberado tras cinco días sin pruebas en su contra. Años más tarde, en 1978, fue condenado por posesión de drogas, pero logró salir en libertad tras apelar su condena.
A lo largo de su carrera, Sabu también incursionó en el cine y la televisión, convirtiéndose en una figura popular en el ámbito artístico. Sin embargo, su vida personal estuvo marcada por relaciones tumultuosas y luchas con las adicciones. Tras anunciar su retiro de la música en 1984, se dedicó a la producción musical y contrajo matrimonio en 1987.
El legado de Sabu perdura en la memoria de sus fanáticos, quienes recordarán su contribución a la música en varios idiomas y su impacto en la cultura latina. Su trágica partida deja un vacío en la industria musical, pero su historia de superación y talento sigue inspirando a nuevas generaciones.