En un anuncio que sacudió el escenario político internacional, el presidente venezolano Nicolás Maduro advirtió sobre lo que calificó como un inminente ataque militar estadounidense contra Venezuela, un acto que podría desatar una “guerra catastrófica” en el Caribe y América del Sur. Durante una sesión del Consejo de Estado, Maduro enfatizó que su gobierno está preparado para defender la soberanía nacional, respaldado por un creciente apoyo regional y mundial.
La movilización del pueblo venezolano se hizo palpable hoy en Caracas, donde miles de ciudadanos se autoconvocaron para llenar la histórica avenida Bolívar en un acto de patriotismo y unidad. Esta respuesta masiva se produce en medio de un clima de tensión creciente, donde Maduro denuncia que las amenazas del “imperio estadounidense” buscan desestabilizar la paz en la región.
“Venezuela está en un estado avanzado de preparación para cualquier escenario”, afirmó Maduro, quien subrayó la fortaleza constitucional de su gobierno y la legalidad de las acciones que se tomarán en defensa del país. El presidente instó a los ciudadanos a mantenerse unidos, recordando que la paz debe ser defendida con determinación y fuerza.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención, dado el rechazo creciente a las amenazas contra Venezuela desde diversas naciones y organizaciones, incluyendo la ONU y la CELAC. La retórica de Maduro resuena en un contexto donde la historia reciente ha estado marcada por intentos de desestabilización y agresiones externas.
La situación se torna crítica y el mundo aguarda las próximas acciones del gobierno venezolano, que se muestra decidido a no ceder ante lo que considera agresiones imperiales. Con un llamado a la unidad y la defensa de la soberanía, Maduro busca consolidar el respaldo de su pueblo en un momento que podría definir el futuro de Venezuela y la estabilidad de toda la región.
