Una tragedia impactante ha sacudido al mundo del culturismo y la comunidad colombiana: Sunilda Hoyos, conocida como Amy Méndez o “Mujer Hulk”, fue hallada muerta en su residencia en España, y su esposo, Jarot Gellin, fue encontrado sin vida poco después, en lo que se presume como un caso de violencia de género seguido de suicidio.
Sunilda, de 43 años, era una atleta admirada internacionalmente, famosa por su impresionante trayectoria en el culturismo y su capacidad de inspirar a miles de mujeres. Sin embargo, detrás de su éxito, se ocultaban problemas maritales graves que la llevaron a planear su separación. Según fuentes cercanas, Sunilda había expresado temores por su seguridad debido al carácter agresivo de Jarot, y estaba decidida a iniciar los trámites de divorcio.
El 18 de junio, un compañero de gimnasio, alarmado por su ausencia, reportó su desaparición a las autoridades. Al día siguiente, la policía realizó un allanamiento en su domicilio en Costa del Sol y descubrió el cuerpo de Sunilda con signos de haber sido golpeada. Jarot fue encontrado en la misma residencia, con heridas que apuntan a un suicidio. La autopsia revelará más detalles, pero los indicios apuntan a un ataque brutal que culminó en un desenlace trágico.
Este caso ha desatado una ola de conmoción y repudio, no solo en el ámbito deportivo, sino también en la sociedad en general. La violencia de género ha sido un tema candente y el gobierno español ha expresado su firme compromiso en la lucha contra este flagelo. La comunidad de culturismo llora la pérdida de Sunilda, recordándola como una figura de fortaleza y resiliencia.
Las investigaciones continúan, mientras se revelan inquietantes detalles sobre la vida privada de la pareja, incluyendo tensiones económicas y problemas de control. La última publicación de Sunilda en redes sociales, donde abordó aspectos delicados de su vida, ha dejado a muchos preguntándose si fue escrita por ella o manipulada por Jarot. Este caso trágico subraya la urgente necesidad de abordar la violencia contra las mujeres y fomentar la denuncia oportuna de estos actos.