En un impactante giro de los acontecimientos, la joven modelo y empresaria brasileña Luna Abrao fue brutalmente apuñalada por su exnovio, Alex Oliveira, durante una transmisión en vivo en sus redes sociales. El escalofriante suceso, que tuvo lugar el 19 de mayo de 2025, capturó la atención de miles de espectadores que presenciaron en tiempo real el momento en que la joven, en un acto de valentía, anunciaba su decisión de terminar la relación. Sin embargo, lo que debería haber sido un momento de liberación se tornó en una pesadilla.
Mientras Luna hablaba con sus seguidores, Alex irrumpió en su hogar, armado con un cuchillo. En cuestión de segundos, el ambiente cambió drásticamente. Tras un grito aterrador que alertó a su tía, Alex atacó a Luna, hiriéndola gravemente mientras la audiencia observaba horrorizada. Las imágenes del ataque se volvieron virales, desatando una ola de indignación y preocupación en Brasil y más allá.
Los gritos de Luna pidiendo ayuda resonaron en el vecindario, llevando a un vecino a intervenir y detener la hemorragia hasta que llegó la ambulancia. A pesar de las graves heridas, que incluyeron múltiples cortes en su cuerpo, Luna fue trasladada al hospital donde los médicos lograron estabilizar su condición. La rápida respuesta de los servicios de emergencia y el apoyo de sus seguidores fueron cruciales para su supervivencia.
Mientras la comunidad se unía en apoyo a Luna, la policía intensificó la búsqueda de Alex, quien se encuentra prófugo. Las autoridades han declarado que podría enfrentar hasta 40 años de prisión si es capturado y condenado por intento de feminicidio y violencia doméstica. Este caso ha reavivado el debate sobre la violencia de género en Brasil, recordando a todos que detrás de las apariencias brillantes en las redes sociales, a menudo se ocultan historias de abuso y miedo.
Luna, agradecida por su vida y decidida a seguir adelante por su hija, ha comenzado su proceso de recuperación, compartiendo su historia para inspirar a otros. La atención mediática y la presión pública podrían ser determinantes en la captura de su agresor. La lucha por justicia apenas comienza.