**MONSTRUO ASESINO SERIAL: TRES MUJERES, UN MISMO DESTINO TRÁGICO Y LA ATERRADORA VERDAD EN TIJUANA**
Un monstruo acecha en las sombras de Tijuana, dejando un rastro de dolor y terror tras de sí. Tres mujeres jóvenes, Elizabeth Martínez Cigarroa, Karen González Argüeyes y Ángela Carolina Acosta, han perdido la vida en circunstancias escalofriantes que revelan un patrón de feminicidio que ha dejado a la comunidad en estado de shock. Las autoridades, tardías en conectar los puntos, ahora enfrentan la presión de una sociedad indignada que exige justicia.
Elizabeth, de solo 26 años, fue encontrada sin vida en el maletero de su camioneta, un destino trágico que se suma a los de otras mujeres que, como ella, fueron contactadas por un hombre de apariencia inofensiva, pero que ocultaba un oscuro secreto. La última vez que se vio a Elizabeth, había compartido su ubicación con su familia, un acto de precaución que lamentablemente no pudo salvarla. La angustia de su familia se tornó en desesperación cuando, tras días de búsqueda, su cuerpo fue hallado con signos evidentes de maltrato.
Los ecos de su asesinato resonaron en la comunidad, reavivando el miedo entre las trabajadoras 𝓈ℯ𝓍uales de la zona. A tan solo días de la tragedia, otro cuerpo fue encontrado, el de Ángela, con similitudes inquietantes al caso de Elizabeth. Las autoridades finalmente reconocieron que estaban tras la pista de un asesino serial, un individuo que cruzaba la frontera para cometer sus crímenes y regresaba a Estados Unidos.
La identificación del principal sospechoso, Brian Andrade Rivera, ha desatado una cacería internacional. Con un perfil psicológico que recuerda a infames asesinos como Ted Bundy, su captura se ha convertido en una prioridad. Sin embargo, la angustia persiste: ¿será extraditado a México para enfrentar la justicia por sus crímenes?
La presión social crece mientras las familias de las víctimas claman por respuestas y justicia. En un contexto donde la violencia de género sigue siendo una realidad aterradora, la comunidad de Tijuana no se detendrá hasta que el monstruo sea detenido. La lucha por la justicia apenas comienza.