**TRISTE: La Caída de la IGLESIA de JESÚS ADRIÁN ROMERO**
En un giro devastador, Jesús Adrián Romero, el icónico líder de la música cristiana, ha revelado la profunda crisis que enfrenta su vida personal y ministerial. En un impactante video que ha conmocionado a sus seguidores, confesó: “Mi matrimonio no está bien, solo nuestros hijos nos mantienen unidos.” Estas palabras desgarradoras reflejan una lucha interna que ha estado gestándose durante años, mientras su iglesia, Vástago Epicentro, se tambalea al borde del colapso.
El artista, conocido por su voz suave y letras inspiradoras, ha admitido sentirse desconectado de su fe y cuestionar su propósito. “No estoy deprimido, pero no tengo motivación para nada,” expresó, dejando al descubierto la vulnerabilidad detrás de su imagen pública. Su decisión de cancelar todos los conciertos programados para el resto del año, en un intento por priorizar su salud emocional, marca un momento crítico en su carrera.
Los rumores sobre su posible conversión al catolicismo y las constantes críticas de sectores evangélicos tradicionales han intensificado la tormenta que rodea su ministerio. La controversia no solo afecta su reputación, sino que también ha impactado gravemente a su iglesia, que ha visto disminuir drásticamente la asistencia en los últimos meses. La atmósfera que antes era vibrante y llena de esperanza ahora se siente vacía y sin dirección.
La caída de Vástago Epicentro, que prometía ser un modelo innovador de espiritualidad contemporánea, se ha convertido en un triste recordatorio de los peligros de construir un ministerio alrededor de una figura carismática. La crisis de Romero es un llamado urgente a la reflexión sobre los verdaderos fundamentos de la fe. La comunidad cristiana observa con preocupación cómo un ícono se desmorona, llevando consigo las esperanzas de miles que alguna vez encontraron en su música un refugio espiritual. La pregunta persiste: ¿podrá Jesús Adrián Romero reconstruir lo que ha perdido, o será este el fin de una era?