**LA TRAGEDIA DE LA QUINCEAÑERA: Daniela Montemayor**

Una celebración que prometía ser un hito en la vida de Daniela Montemayor se convirtió en una pesadilla. La joven de 15 años, llena de sueños y alegría, colapsó repentinamente durante su fiesta de quince años en San Pedro de las Colonias, Coahuila, el 30 de julio de 2022. En un giro devastador, lo que debía ser una noche de risas y bailes se transformó en un caos de gritos y desesperación.

Daniela, quien había luchado contra problemas cardíacos desde pequeña, había sido declarada suficientemente saludable para disfrutar de su gran día. Sin embargo, en el momento más feliz de su vida, mientras bailaba rodeada de amigos y familiares, sufrió un infarto fulminante que la dejó inmóvil en la pista. La música se detuvo abruptamente y el silencio aterrador se apoderó del salón, donde minutos antes reinaba la alegría.

A pesar de los esfuerzos de su madre, María, y de los paramédicos que llegaron rápidamente, Daniela no sobrevivió. La noticia de su muerte, confirmada en la madrugada del 31 de julio, dejó a la comunidad en estado de shock. Los amigos que compartieron su última risa ahora lloraban desconsoladamente, incapaces de procesar la pérdida de una joven prometedora que soñaba con ser médica.

Las redes sociales estallaron con mensajes de condolencias y especulaciones sobre lo ocurrido. Sin embargo, las autoridades confirmaron que se trató de una fatalidad médica, un recordatorio desgarrador de la fragilidad de la vida. En los días posteriores, la comunidad se unió en vigilia, recordando a Daniela no solo como una alumna ejemplar, sino como un alma brillante que tocó los corazones de todos.

La familia Montemayor, en medio de su dolor, ha decidido transformar esta tragedia en acción. Han iniciado la campaña “Corazón de Daniela”, promoviendo la importancia de chequeos médicos regulares, especialmente para jóvenes con antecedentes de problemas cardíacos. La historia de Daniela, aunque trágica, se convierte en un llamado urgente a cuidar nuestra salud y valorar cada momento. Su legado perdurará, recordándonos que la vida es un regalo que debemos apreciar cada día.