**ÚLTIMA HORA | La inflación en EEUU le quita la razón a Trump: la FED no puede bajar los tipos**
La economía estadounidense enfrenta un nuevo golpe: la inflación se mantiene obstinadamente alta, desafiando las expectativas y dejando en evidencia las afirmaciones de Donald Trump sobre un inminente recorte de tipos de interés por parte de la Reserva Federal. Según los últimos datos, la tasa general de inflación se sitúa en un 2,3%, justo como se preveía, pero la preocupante tasa subyacente ha escalado a un 2,7%, superando las proyecciones y sugiriendo que la presión inflacionaria persiste.
Este repunte en la tasa subyacente, que ahora se encuentra más cerca del 3% que del objetivo del 2%, ha generado una reacción inmediata en los mercados. Aunque los índices bursátiles se mantienen en terreno positivo, con el S&P 500 y el Nasdaq mostrando ligeras ganancias, la incertidumbre se cierne sobre los inversores, quienes perciben que la FED podría tener que reconsiderar sus planes de política monetaria. La falta de un recorte en los tipos de interés podría tener repercusiones significativas en la economía y la confianza del consumidor.
Los futuros del S&P 500 avanzan un 0,28%, mientras que el Nasdaq muestra un incremento del 0,38%. Sin embargo, la reacción en el mercado de bonos es más cautelosa, con rendimientos que apenas fluctúan, lo que indica que los inversores están sopesando las implicaciones de estos nuevos datos inflacionarios.
La situación se complica aún más al considerar que la inflación subyacente, que excluye los precios volátiles de alimentos y energía, sigue siendo “pegajosa”, lo que podría obligar a la FED a mantener los tipos de interés en niveles elevados por más tiempo del anticipado. Este escenario no solo desafía las expectativas de recortes, sino que también pone en entredicho la narrativa de un regreso a la normalidad económica.
La presión sobre la administración Biden y la Reserva Federal aumenta, mientras el país observa de cerca cómo se desarrollan los acontecimientos en este contexto económico crítico. La incertidumbre es palpable y los próximos movimientos de la FED serán cruciales. ¡Estén atentos para más actualizaciones!