Lionel Messi ha expresado su descontento ante una nueva y polémica norma impuesta por Paraguay de cara al próximo enfrentamiento de clasificación para el Mundial 2026 entre ambas selecciones. En el estadio Defensores del Chaco, los seguidores de Argentina tendrán prohibido portar camisetas de la selección albiceleste o cualquier prenda de clubes que contenga nombres y números de jugadores rivales, incluido el famoso “10” de Messi.
La Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) explicó que esta medida busca evitar una posible ventaja para la hinchada visitante y mantener la “ventaja de jugar en casa”. Fernando Villasboa, el gerente de licencias de la APF, señaló a EFE: “Ya hemos advertido que, en los sectores locales, no permitiremos el acceso con camisetas que no sean de Paraguay, o al menos neutrales, pero no de nuestros rivales. No es algo contra ningún jugador en particular; respetamos profundamente la carrera de todos los futbolistas. Solo queremos que la ventaja de ser locales se mantenga”.
Ante esta situación, Messi expresó su incredulidad y decepción. “¿Cómo pueden hacer esto?” cuestionó el capitán de Argentina. “Entiendo que quieran apoyar a su selección, pero imponer estas restricciones es una falta de respeto hacia los aficionados y el deporte. Los hinchas vienen a disfrutar del fútbol y apoyar a quienes admiran. Esto va más allá de lo deportivo”.
La Albiceleste, que lidera la clasificación sudamericana con 22 puntos, busca afianzar su camino hacia el Mundial 2026. Sin embargo, la decisión de Paraguay añade una tensión adicional a un partido que ya de por sí promete ser intenso. Para los fanáticos de Messi y Argentina, esta norma representa un obstáculo inesperado en su apoyo al equipo campeón del mundo.