¡ÚLTIMA HORA! Lionel Messi, el ícono del fútbol mundial, jugará su último partido oficial en Argentina el próximo jueves 4 de septiembre. Este encuentro de Eliminatorias contra Venezuela no es solo un partido; es el cierre de una era, el adiós de un genio que ha dado todo por su país. A sus 38 años, Messi se despide de la celeste y blanca en su tierra natal, y la magnitud de este momento parece no ser comprendida por todos.

Tras una humillante derrota de 3-0 con el Inter Miami frente a Seattle Sounders, Messi llegó a Argentina con el corazón intacto, dispuesto a enfrentar a su selección. Su carácter y dedicación son inigualables; mientras otros se esconden tras la derrota, él se presenta ante sus fanáticos, sonriente y agradecido, preparándose para lo que será un partido histórico.

La AFA se encuentra bajo presión para honrar a su máximo exponente, pero hasta ahora, el reconocimiento ha sido escaso. ¿Es justo que el mejor jugador de la historia se despida sin el homenaje que merece? La falta de una celebración adecuada para un ícono que ha traído alegría y orgullo a millones es una injusticia que duele. Messi ha ganado todo: cuatro títulos mayores con la selección, y sin embargo, se enfrenta a su último partido por los puntos en un ambiente de indiferencia.

La emoción está en el aire, y la familia de Messi estará presente en el Monumental. Este encuentro no es solo un trámite; es el último baile de un maestro. La ciudad debe gritar, debe rendir homenaje a un hombre que ha sido sinónimo de esperanza para un país. La historia está a punto de escribirse, y el tiempo se agota. No habrá segundas oportunidades. Este jueves, Argentina debe levantarse y mostrarle a Messi el amor que se ha ganado. ¡No faltes!