¡Impactante giro en el mundo del espectáculo argentino! La emotiva despedida de Marixa Balli de “LAM” se ha transformado en un escándalo mayúsculo tras revelarse que ya tenía contratos firmados con la competencia directa. La panelista, conocida por su fuerte personalidad y carisma, dejó el programa de Ángel de Brito en medio de lágrimas y agradecimientos, alegando “falta de energía” y la necesidad de enfocarse en su nuevo emprendimiento, Surama. Sin embargo, lo que parecía un adiós sincero ha sido desmentido brutalmente por el propio De Brito, quien no dudó en afirmar que Marixa ya estaba en negociaciones con Telefe, el canal rival que acapara el rating.
La noticia ha sacudido a la audiencia y a sus compañeros, quienes la vieron partir con cariño, sin imaginar que su salida era parte de un plan mucho más calculado. “No fue solo una decisión personal, hay mucho más detrás”, sentenció De Brito, dejando claro que la lealtad en el mundo del espectáculo es un juego peligroso. Mientras Marixa se mostraba emocionada y agradecida, ya estaba tejiendo su futuro en un canal que compite directamente con el que dejó atrás.
Las redes sociales estallan con opiniones divididas: algunos apoyan su derecho a buscar nuevas oportunidades, mientras que otros la acusan de deslealtad. ¿Fue una traición o simplemente una jugada estratégica? La tensión crece, y con ella, las preguntas sobre su futuro en Telefe. ¿Qué formato la recibirá? ¿Será protagonista o un rol secundario?
Mientras tanto, el ambiente en “LAM” se vuelve incómodo. La producción ya está al tanto de la situación, y la confusión reina entre sus excompañeros. Marixa aún no ha hecho declaraciones sobre su nuevo rumbo, manteniendo un silencio que solo añade más intriga al drama.
Este escándalo no solo es un capítulo más en la telenovela de la televisión argentina, sino un recordatorio de que en este mundo, las despedidas nunca son tan simples como parecen. ¡Estaremos atentos a los próximos movimientos!